Carreteras con doble sentido: doble peligro

Calles y carreteras

Carreteras de doble sentido

Las vías de doble sentido, en las que no hay separación física de los sentidos de circulación en una misma calzada, tienen ciertas características que las hacen peligrosas, tanto por el riesgo de colisiones frontales como por las salidas de vía. Además, la presencia de usuarios con distinta masa y velocidad, como pueden ser coches, camiones, peatones y ciclistas, agrava la situación. Esto explica que, pese a soportar menos tráfico que las autopistas y autovías, el 55% de los fallecidos en nuestras carreteras, se originan en este tipo de vías.

Por eso, la actitud responsable de los usuarios de este tipo de vías es esencial para evitar incidentes. Ser respetuoso con las señales de circulación y respetar los límites de velocidad forman parte de lo que un buen conductor debe hacer, pero además, en las vías de doble sentido hay que tener en cuenta muchas más variables. Te las contamos para que sepas adecuar tu conducción a cada circunstancia.  

Atención al estado de la carretera

El ancho de los carriles varía notablemente entre este tipo de vías, así como su trazado, señalización y estado del firme. Este hecho, unido a la extensa variedad de tipología de vehículos, hace que el riesgo aumente notablemente. 

Una red con muchos kilómetros

Las vías de doble sentido de circulación son el modelo más extendido en nuestro país, casi un 90%, estando mayoritariamente en el ámbito interurbano.

Precaución - Carreteras de doble sentido

No olvides extremar la precaución

Respeta la velocidad

Prestar atención a la limitación de velocidad es muy importante ya que en estas carreteras puedes encontrar, entre otros factores, trazados sinuosos, cruces a nivel, salidas, entradas. Además, por ellas circula todo tipo de vehículos, incluidos ciclomotores, vehículos agrícolas, ciclistas y peatones. Recuerda que ya no es posible superar en 20 km/h la velocidad genérica de la vía al realizar adelantamientos.

Adelantamiento a ciclistas

en vías de más de un carril por sentido debes cambiar de carril para realizar el adelantamiento, igual que si lo hicieras a otro vehículo. Si es un único carril por sentido debes respetar al menos una separación de 1,5 metros de la bicicleta y es importante que lo hagas a una velocidad moderada ya que el aire desplazado por tu vehículo puede desequilibrar al ciclista.

Cuidado con los choques frontales

La mayor cifra de mortalidad en este tipo de vías la generan los choques frontales entre vehículos que circulan en sentido contrario, junto con las salidas de vía. Moderar la velocidad, respetando los límites máximos de la vía, mantener la atención en todo momento y evitar adelantamientos, conllevaría un descenso de estas trágicas cifras.

¡Ojo! Animales sueltos

El riesgo de colisión con especies de fauna es mayor que en el resto de las vías, especialmente por no estar valladas. Este hecho se agrava en algunas zonas de campo abierto y, especialmente en las temporadas de gran movimiento de animales. Nuevamente, la precaución es un elemento fundamental.

Hazte ver sin deslumbrar

La iluminación del vehículo es un elemento decisivo tanto para ver como para que te vean. No deslumbrar al conductor del vehículo que viene de frente o hacer uso de la intermitencia, forman parte del comportamiento básico en este tipo de vía. Circula siempre con la luz de cruce encendida, tanto en ciudad como en carretera, si tu vehículo no está dotado de luces diurnas, obligatorias en todos los automóviles matriculados en España con posterioridad al año 2011. Diversos estudios estiman entre un 4 y un 10% el número de fallecidos evitados si todos los vehículos estuvieran dotados de luces diurnas o llevaran conectado el alumbrado de cruce y se evitarían hasta un 58 % de lesionados graves. Desde el anochecer, hasta el amanecer o con climatología adversa, es obligatorio llevar siempre encendido el alumbrado del vehículo, al igual que cuando circules por el interior de túneles, por carriles reversibles, adicionales y habilitados para circular en sentido contrario.

La calzada y el arcén, lugares de riesgo

En caso de avería o cualquier tipo de incidente, debes evitar quedarte en la calzada. Incluso el arcén, si lo hubiera, es un lugar de gran riesgo, por lo que intenta salirte de la calzada o sitúate detrás de una barrera para evitar ser atropellado por otro vehículo. La señalización del lugar, para avisar al resto de usuarios, se hace imprescindible. Coloca un triángulo en cada sentido de circulación y a una distancia aproximadamente de 50 metros del vehículo, siendo visibles desde al menos  100 m. por el resto de conductores. Para salir del vehículo ponte siempre el chaleco reflectante.

Siempre por la ruta más segura

Aunque supongan un incremento en la distancia a recorrer, elige siempre las rutas más seguras, que evitan las carretas convencionales de doble sentido, y circula por vías de alta capacidad: autovías y autopistas.

Las carreteras convencionales de doble sentido tienen un plus de peligrosidad. Para circular por ellas, aumenta la precaución